Conoce la historia de las flores secas

Secar flores para uso en medicina, moda y decoración es una práctica simple pero elegante que se remonta a miles de años atrás. De hecho, los arqueólogos han encontrado flores conservadas en una tumba romana que tienen más de dos mil años de antigüedad. Secar flores es una práctica que siempre ha disfrutado la humanidad. Aprende más sobre la historia de secar flores con esta breve descripción.

Los orígenes antiguos de las flores secas

Los antiguos egipcios eran entusiastas de las flores en general. Los registros muestran que los antiguos egipcios practicaban el arte de arreglos florales precisos y significativos. Secar flores también era una práctica común que se usaba en ritos funerarios, ceremonias religiosas y otras ocasiones importantes. Los antiguos egipcios usaban flores secas en guirnaldas y otros arreglos que colocaban dentro de las tumbas. Además de la decoración, los antiguos egipcios secaban flores para usar en perfumes, inciensos, aceites o incluso pigmentos cosméticos.

Los antiguos griegos y romanos también eran aficionados a las flores secas, especialmente en forma de coronas y guirnaldas. Ambas civilizaciones usaban coronas para honrar a guerreros, atletas, poetas y políticos. Mientras tanto, las guirnaldas eran decoraciones que las personas usaban para adornar puertas, edificios cívicos y monumentos. Las guirnaldas también eran parte de ocasiones importantes, como funerales y bodas.

Edad Media

Las flores secas también fueron populares en Europa durante la Edad Media, donde la gente creía que las flores y hierbas secas tenían propiedades medicinales. Si bien la ciencia detrás de estas teorías no siempre era sólida, algunas hierbas y flores influyeron en la medicina de la época. Las iglesias eran lugares populares para jardines de hierbas. Los especialistas cosechaban y secaban hierbas y flores para usar en tés, ungüentos, arreglos y otras pociones para dar al resto de la comunidad.

Arte Japonés de las flores secas

En Japón en el siglo XVI, secar flores se convirtió en una forma de arte precisa y honrada. Oshibana, el arte de secar y prensar plantas, implica elegir, prensar y arreglar cuidadosamente flores secas en papel washi. El resultado son diseños inspirados en la naturaleza que reflejan la reverencia que la cultura japonesa tenía por las flores y plantas del mundo natural.

Moda floral Victoriana

A medida que aumentaba el comercio entre Asia y Europa, Oshibana llegó a la cultura inglesa. Esto inspiró una nueva apreciación por las flores secas en la Inglaterra victoriana. El secado de flores se convirtió en un pasatiempo popular; las mujeres usaban flores secas para hacer guirnaldas, diseñar fotos o adornar accesorios como abanicos, joyas y guantes. A medida que las flores secas se convirtieron en un elemento básico de la moda, se desarrolló toda una cultura de lenguaje y simbología en torno al arte. De hecho, usar flores para comunicar varios sentimientos y mensajes, como amor, disculpas o felicitaciones, es una práctica que todavía usamos hoy en día.

Recuerdo del Jubileo de Diamante de la Reina Victoria (1897)



Aunque el uso de flores conservadas ha cambiado a lo largo de la historia del secado de flores, todavía se pueden ver trazas de prácticas antiguas, formas de arte y simbolismo hoy en día. Puedes recuperar algunas de estas tradiciones en tu hogar, creando una guirnalda de flores para celebrar un cumpleaños, animándote a la técnica Oshibana y revivir el arte floral japonés o haciendo coronas y centros. En Floueri te ofrecemos una amplia selección de flores para que explores todas estas posibilidades.

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